LA CONSCIENCIA

La gente confunde a la CONCIENCIA con la INTELIGENCIA o con el INTELECTO, y a la persona muy intelectual, le dan el calificativo de muy consciente.

La CONCIENCIA en el hombre es una especie muy particular de APREHENSIÓN DE CONOCIMIENTO INTERIOR totalmente independiente de toda actividad mental.

La facultad de la CONCIENCIA nos permite el conocimiento de SÍ MISMOS. La CONCIENCIA nos da conocimiento íntegro de lo que ES, de donde está, de lo que realmente se sabe, de lo que ciertamente se ignora.

La PSICOLOGÍA REVOLUCIONARIA GNÓSTICA, enseña que sólo el hombre mismo puede llegar a conocerse a sí mismo. Solo nosotros podemos saber si somos conscientes en un momento dado o no. Sólo uno mismo puede saber de su propia conciencia y si esta existe en un momento dado o no.

El hombre mismo y nadie más que él, puede darse cuenta por un momento de que antes de ese instante, realmente no era consciente, tenía su conciencia muy dormida, después olvidará esa experiencia o la conservará en su memoria como el recuerdo de una fuerte experiencia.

Es urgente saber que la CONCIENCIA en el Ser Humano no es algo continuo y permanente. Normalmente la CONCIENCIA en el Ser Humano duerme profundamente, raro, muy raro es encontrar personas de Conciencia Despierta.

Raros, muy raros son los momentos en que la CONCIENCIA HUMANA está despierta; hombres y mujeres trabajan, manejan carros, deambulan por las calles, se casan, se mueren, etc. con la conciencia totalmente dormida, y sólo en momentos muy excepcionales; ésta despierta.

La vida del ser humano es una vida de sueño, pero creemos que estamos despiertos y jamás admitiremos que estamos soñando, que tenemos la conciencia dormida.

Si alguien llegara a despertar, se sentiría espantosamente avergonzado consigo mismo, comprendería de inmediato su payasada y su ridiculez; porque esta vida moderna es espantosamente ridícula, horriblemente trágica y rara vez sublime.

Si un boxeador llegara a despertar su conciencia de inmediato en plena pelea, miraría avergonzado a todo el honorable público, se sacaría sus guantes, posiblemente se disculparía de su adversario y huiría del horrible espectáculo, ante el asombro de las dormidas e inconscientes multitudes, que no alcanzarían a comprender lo que se está sucediendo en el interior del boxeador, que despertó su conciencia en ese instante.

Cuando el ser humano admite que tiene la CONCIENCIA DORMIDA, podemos estar seguros de que ya empieza a despertar; necesitamos empezar a DESPERTAR CONCIENCIA, el problema es que uno de los vehículos para que esto suceda es la Educación, pero la moderna Educación nada sabe de todo esto.

Las Escuelas reaccionarias de Psicología anticuada que niegan la existencia de la CONCIENCIA y hasta la inutilidad de tal término, acusan el estado de sueño más profundo. Los secuaces de tales Escuelas duermen muy profundamente en un estado prácticamente inconsciente e infra-consciente.

Quienes confunden a la CONCIENCIA con las funciones Psicológicas; pensamientos, sentimientos, impulsos motrices, sensaciones y percepciones, están muy inconscientes, duermen profundamente.

Quienes admiten la existencia de la CONCIENCIA pero niegan de plano los distintos GRADOS DE CONSCIENCIA, acusan falta de práctica, falta de experiencia consiente, en esto del Trabajo por el Despertar de la Conciencia.

Toda persona que por alguna vez haya despertado momentáneamente, sabe muy bien por experiencia propia que existen distintos grados de conciencia observables en uno mismo.

Primero: TIEMPO. ¿Cuánto tiempo permanecimos conscientes?

Segundo: FRECUENCIA. ¿Cuántas veces hemos despertado conciencia?

Tercero: AMPLITUD Y PENETRACIÓN. ¿De qué y de cuanto se era consciente?

La PSICOLOGÍA REVOLUCIONARIA GNÓSTICA, afirma que mediante grandes SUPER-ESFUERZOS muy especiales se puede despertar la Conciencia y hacerla permanente, continua y controlable.

La Nueva Educación debe tener por objeto despertar CONCIENCIA de los estudiantes. De nada sirven diez o quince años de estudios en la Escuela, el Colegio y la Universidad, si al salir de las aulas somos autómatas dormidos, si andamos por las calles, absortos en nuestras fantasías.

No es exagerado afirmar que mediante algún gran ESFUERZO, se puede ser consciente de sí mismo tan solo por un par de minutos.

Es claro que en esto suelen haber hoy raras excepciones que tenemos que buscar con la linterna de Diógenes, esos casos raros están representados por los HOMBRES VERDADEROS, BUDDHA, JESÚS EL CRISTO, HERMES, EL SANTO LAMA, QUETZALCOATL, etc.

No hay dudas que estos fundadores de RELIGIONES, que cambiaron el rumbo de la historia,  poseyeron CONCIENCIA CONTINUA.

Normalmente la gente NO es consciente de sí mismas. La ilusión de ser conscientes en forma continua, nace de la memoria, que le da cierta continuidad a la procesión de pensamientos.

El hombre que practica un ejercicio retrospectivo para recordar toda su vida, puede en verdad rememorar, recordar cuántas veces se casó, cuántos hijos engendró, quiénes fueron sus padres, sus Maestros, etc., pero esto no significa despertar conciencia, esto es sencillamente un acto de memoria, que nos permite recordar actos inconscientes y eso es todo.

Es necesario comprender que existen cuatro estados de CONCIENCIA. Estos son: SUEÑO, ESTADO DE VIGILIA, AUTO-CONCIENCIA y CONCIENCIA OBJETIVA.

El Ser Humano común y corriente, sólo vive en dos de esos estados. Una parte de su vida transcurre en el SUEÑO y la otra en el mal llamado ESTADO DE VIGILIA, el cual también es sueño.

El hombre que duerme y sueña, unas veces hasta tiene pesadillas; y cree que despierta por el hecho de regresar a su cuerpo, al ESTADO DE VIGILIA, pero en realidad durante este segundo estado o de vigilia continúa soñando, continúa proyectando sus propios pensamientos e ideas subjetivas.

Esto es semejante al amanecer, se ocultan las estrellas debido a la presencia de la luz solar, pero ellas continúan existiendo aunque los ojos físicos no las perciban; y a decir de muchos si hacemos un hoyo profundo de tal forma que la luz del sol, ya no nos ilumine, podemos ver las estrellas durante el día, metidos dentro de ese hoyo.

Es decir con la presencia de la luz del Sol, las estrellas están allí mismo; así en el estado de vigilia, cuando actuamos con nuestro cuerpo físico, esas estrellas continúan en nuestro cielo interior; ellas simbolizan nuestros pensamientos, imágenes, emociones, etc. totalmente subjetivas.

Toda esta terminología es desconocida para el ser humano, que nada sabe sobre AUTO-CONOCIMIENTO y mucho menos de la CONCIENCIA OBJETIVA.

Sin embargo, la gente es orgullosa y todo el mundo se cree AUTO-CONSCIENTE; creemos firmemente tener conciencia de sí y de ninguna manera aceptaría que se le dijese que es un dormido y que vive inconsciente de sí mismo. Solo con mente nueva, abierta y libre es posible aceptar estas ideas revolucionarias, es decir mirarse en el espejo citado en la Epístola Universal de Santiago.

Nos dice ese Maestro: Mas sed hacedores de la Palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos a vosotros mismos. Cuando uno escucha las ideas revolucionarias del despertar de la Conciencia, y las admite con mente nueva, mas no es capaz de dedicarse a conocerse a sí mismo, es ese hombre que se miró al espejo y dio media vuelta y se fue, olvidándose que quien era, citado por Santiago, ese Gran Maestro de la Humanidad.

Existen momentos excepcionales en que despertamos la conciencia, pero esos momentos son muy raros, pueden representarse en un instante de peligro supremo, durante una intensa emoción, en alguna nueva circunstancia, en alguna nueva situación inesperada, etc.. Muchas veces cuando tenemos la oportunidad de viajar, y vemos esos lugares con mente nueva, somos muy receptivos, lo que es producto de haber dejado a un lado la memoria y los recuerdos asociados al lugar de origen.

Es verdaderamente una desgracia que no tengamos ningún dominio sobre esos estados fugaces de conciencia, que no podamos evocarlos, que no podamos hacerlos continuos.

Sin embargo, la PSICOLOGÍA DEL AUTOCONOCIMIENTO, afirma que el hombre puede LOGRAR el control de la CONCIENCIA y adquirir AUTO-CONCIENCIA en forma continua y permanente.

La GNOSIS REVOLUCIONARIA tiene métodos, procedimientos científicos para DESPERTAR CONCIENCIA.

Si queremos DESPERTAR CONCIENCIA necesitamos empezar por examinar, estudiar y luego eliminar todos los obstáculos que impiden el despertar de nuestra conciencia; pero el Camino del Despertar, debe ser empezado desde los mismos bancos de la Escuela.

Primero debemos comprender que nosotros, no poseemos una verdadera individualidad, que no tenemos un Yo individual, sino al contrario, poseemos un Yo múltiple. Voy a comer dice el YO de la Digestión, YO no quiero comer todavía, voy a leer el periódico, dice el YO INTELECTUAL, al Diablo con el periódico, dice el YO del Movimiento, voy a dar un paseo; pero de todo ello no hay consciencia, son reacciones mecánicas que no obedecen a ningún orden.

Realmente todavía no somos INDIVIDUOS, no estamos INDIVIDUALIZADOS, solo estamos INSTINTIVIZADOS. Dentro de cada cuerpo humano viven muchos YOES. La PLURALIDAD DEL YO es la causa de todas nuestras íntimas contradicciones, que constituyen el sueño de la Consciencia.

Queremos comprar una casa muy bonita y cuando ya la tenemos sucede que ya NO nos gusta, o nuevos proyectos surgen en la mente y decimos: Voy a vender esta casa y me compraré otra.

Luchamos hasta lo indecible por formar un hogar con una buena mujer y unos cuantos hijos, y luego, nos enamoramos de otra, por último el castillo de naipes se va al suelo.

EL YO que hoy jura fidelidad a una causa política, es desplazado por otro YO que ya nada tiene que ver con esa causa, y entonces vemos que la persona se retira de dicha causa y termina siendo su opositor político. Los individuos que hoy se fanatiza por una religión o una escuela de filosofía, mañana terminan aborreciendo esa religión o esa Escuela de Filosofía, terminan traicionándola.

Cada YO de la Legión va pasando por la pantalla de la mente en cinta sucesiva y lo que a un YO le gusta a otro le disgusta. Dentro de cada persona vive mucha gente, muchos YOES cada YO tiene su propia mente y su propio criterio, y luchan entre sí por obtener el dominio del Cuerpo, de someterlo a sus propias ideas y deseos; así se explica la múltiples y permanentes contradicciones humanas.

Si pudiéramos tomar una fotografía de un día entero de la vida de un hombre; las múltiples contradicciones humanas, reflejadas en dicha fotografía, nos mostraría la imagen de un loco de atar.

Esa falta de continuidad, se debe a que todavía el ser humano no tiene un CENTRO PERMANENTE DE CONCIENCIA y solo disolviendo el YO a base de rigurosa COMPRENSIÓN, podemos establecer dentro de nosotros la Conciencia, esta es una manifestación del Ser, el Ser es nuestra verdadera identidad, que lamentablemente ahora ha sido suplantada por esa multitud de deseos, apetencias, recuerdos, etc., que no obedecen a inteligencia u orden alguno.

Somos hombres máquinas, controladas por esa multitud de entidades psicológicas; necesitamos con urgencias individualizarnos y poseer CONCIENCIA CONTINUA.

Realmente en el Ser o en la Conciencia está la Verdadera Felicidad, la Paz y la Libertad. Realmente el SER está más allá de todo dolor. La disolución del YO, nos hace bienaventurados.

Mientras exista el YO existirá el dolor, el YO continúa después de la muerte y se perpetúa en nuestros descendientes, en los hijos de nuestros hijos, en las nuevas generaciones.

Nacer es dolor, morir es dolor, la vida es dolor, dolor en la niñez, dolor en la adolescencia, dolor en la juventud, dolor en la madurez, dolor en la vejez, todo en este mundo es doloroso, sin embargo tenemos temor de la muerte.

Cada vez que el dolor nos azote implacable y vengador, debemos comprenderlo en forma íntegra, completa, total, y esto solo es posible, poniendo atención plena en lo que está sucediendo.

Por ejemplo ante una escena de esas tan horribles que son los accidentes de tránsito, debemos unir nuestra atención, no queriendo huir del lugar, no queriendo justificar el accidente, sin culpar a nadie, necesitamos plena reflexión, saber que el YO es MUCHOS, con el propósito de COMPRENDER TOTALMENTE el dolor que en un momento dado, nos acecha y hiere mortalmente.

Si queremos la TRANSFORMACIÓN SOCIAL DE LA HUMANIDAD, necesitamos aprender a aprender; debemos comprender profundamente las tragedias humanas, y sin embargo mantenernos libres de verdad.

Resulta absurdo afirmar con tono profético que todos los accidentes de tránsito figuren en el horóscopo y que el destino es la causa secreta de muchos accidentes de tránsito.

Ciertamente muchos accidentes son el resultado de la Gran Ley que rige todo lo creado. Pero no todos los accidentes son el resultado del destino. Realmente un 99% de los accidentes de tránsito son fiel producto de la imprudencia, es decir de la Conciencia Dormida tanto de los choferes, como de los peatones.

Parece increíble que en muchos países de Latinoamerica, las tantas y tantas tragedias de transito, no hayan logrado alterar en lo más mínimo las leyes de tránsito y circulación vehicular.

Toda una vida de desgracia en la carreteas con conclusiones tan fatales no son suficiente para mover el corazón de la Sociedad Humana. Es apenas creíble que existan SOCIEDADES HUMANAS tan crueles y despiadadas.

Muchos hombres y mujeres jóvenes que a diario son sacrificados en las carreteras en todos los países de Latinoamerica, hubieran podido formar un hogar, gente que hubiera podido ser útil a la sociedad, otras veces fueron condenados a vivir desgraciados en una silla de ruedas, sin que por ello en nada se modifique el sistema de tránsito en las calles de las ciudades. Esto está demostrando hasta la saciedad el grado de inconsciencia e irresponsabilidad en que se halla la HUMANIDAD.

Un escritor famoso consideraba que la cantidad de muertos por accidentes de tránsito según los datos estadísticos anuales equivalía a todos los millones de muertos ocurridos durante la PRIMERA GUERRA MUNDIAL, pero sin embargo nosotros nos seguimos matando accidentalmente.

Esto parece increíble, y sin embargo todo continúa lo mismo, nada se modifica, siguen diariamente los accidentes sin que la SOCIEDAD HUMANA haga el más mínimo esfuerzo por suprimirlos. A la gente le parece esto de lo más natural, de lo más normal. Realmente esto sólo es posible en gente insensible, indolente y cruel, es decir en individuos de CONCIENCIA DORMIDA.

En el fondo, verdaderamente debemos reconocer que los seres humanos todavía no hemos despertado, tenemos la CONCIENCIA DORMIDA, sólo así se explica que esta barbarie no cambie, sin embargo esto no debe servirnos de disculpas para continuar con el asesinato accidental.

Ha llegado la hora de aceptar que vivimos en una sociedad cruel y despiadada, ha llegado la hora de comprender, que como individuos, vivimos con la Consciencia dormida; ha llegado la hora de que la Educación se preocupe por el Despertar de la Conciencia en los jóvenes estudiantes.

Cuando comprendemos profundamente que somos seres de conciencia dormida, crueles y despiadados, surge en nosotros en forma espontánea la llamarada de COMPASIÓN; la CARIDAD UNIVERSAL; entonces ante el asombro o la crítica de todos, nos esforzamos por resolver estos los llamados problemas sociales.

En parte los gobiernos de la tierra son culpables de todas estas dolorosas tragedias relacionadas con el tránsito, y en parte no lo son. Ciertamente los gobiernos son el producto de la sociedad. Si la sociedad es cruel y despiadada, el gobierno es también cruel y despiadado. En síntesis podemos afirmar que la sociedad es la extensión del individuo y que el gobierno es la extensión de la sociedad.

Si el pueblo es inconsciente y cruel, así será tal gobierno. Cuando nosotros estudiamos los pueblos que viven bajo la bota terrible de un Dictador Militar, comprobamos con asombro que cada jefe de familia es un dictador en su casa.

Cuando analizamos la corrupción de un gobierno, podemos estar seguros que a los individuos de dicha sociedad, les gusta también el dinero fácil y el irrespeto a las leyes.

Si existiese sobre la tierra un país con individuos verdaderamente responsables y respetuosos de la vida humana, podéis estar seguros que allí habría un gobierno sabio que haría respetar verdaderamente la vida de cada ciudadano.

Un gobierno verdaderamente justo establecería leyes muy sabias sobre el sistema de circulación y tránsito en las ciudades.

Hoy en día ya las ciudades están congestionadas por carros, conducidas por choferes de CONCIENCIA DORMIDA, y multitudes de gente que luchan por cruzar dichas calles, en igual forma con la CONCIENCIA DORMIDA; por lo que a diario se registran escenas que parten el alma, madres que mueren con sus niños entre sus brazos arrolladas por las máquinas que afanosamente corren por las calles de las ciudades, niños, ancianos, discapacitados, etc., caen bajo las ruedas de los vehículos. No existe piedad para nadie, no existe un átomo de compasión, nadie vale en la ciudad.

Podrían escribirse las epopeyas más conmovedoras, los dramas más dolorosos a partir de los accidentes de tránsito que a diario ocurren en la vida urbana. Seres que vivían dichosos, nobles esposas, madres que adoraban a sus hijos, respetables varones, todos ellos víctimas de automóviles y camiones.

Muchos hogares quedan desamparados, huérfanos... viudas... desolación, ese es el resultado de los accidentes de tránsito; y sin embargo todo continúa como antes, todo parece lo más natural, en nada se modifican los sistemas de circulación y tránsito de las ciudades.

A nadie le duele el dolor ajeno. A nadie le importa un ápice el sufrimiento de su prójimo. El individuo sólo se acuerda que existen estos accidentes dolorosos cuando los experimentan en su propio pellejo. Entonces culpa a todo el mundo, protesta, blasfema, etc., así es este mundo de gente con la CONCIENCIA DORMIDA. Pero no queremos darnos cuenta de nuestra propia crueldad e indolencia, porque tenemos la conciencia totalmente dormida.

Si cada individuo de la sociedad humana se volviera más consciente, más comprensivo, si cada ciudadano entendiera profundamente su propia crueldad, surgiría la CARIDAD en cada corazón, y entonces esta CARIDAD se manifestaría en hechos colectivos, en reformas completas sobre el sistema de circulación y tránsito.

Es muy cierto que por las calles los seres humanos andan absortos en sus propios pensamientos. Esa es la causa de muchos accidentes. No podríamos negar que los seres humanos están dormidos, caminan por las calles como sonámbulos, soñando profundamente... todo esto es muy cierto, pero por lo mismo, es necesario, es urgente, reformar el sistema de tránsito de vehículos por la calle; como también es urgente despertar la Conciencia dormida y sobre todo conducir a la nuevas generaciones por el camino del DESPERTAR DE LA CONCIENCIA.

Los choferes exigen que los peatones anden por las calles con la conciencia totalmente despierta, alertas y vigilantes, para evitar el peligro de accidentes. Este anhelo de los choferes y conductores de toda clase de vehículos es muy bueno y maravilloso, pero la realidad, es distinta, todo el mundo vive absorto en sus propios pensamientos, todo el mundo camina por las calles como un sonámbulo, todo el mundo deambula por las calles con su conciencia dormida.