jueves, 5 de mayo de 2011

SABER ESCUCHAR

En el mundo existen muchos oradores que asombran por su elocuencia, existen líderes espirituales con una encantadora palabra, pero también existen zorros de la política que con su astuto discurso convencen al electorado ingenuo.

A través de la Historia, uchas personas han desarrollado el arte de la elocuencia y es obvio que así se han abierto camino en la vida; mas son pocas las personas que han aprendido a escuchar; y lo que es pero que han descubierto la necesidad de Saber Escuchar.

Saber Escuchar es muy difícil, pocas son las personas que de verdad saben escuchar, es mucho más fácil encontrar en el mundo personas que saben hablar.

CUANDO HABLA EL MAESTRO, la maestra, el conferencista, el pastor, el sacerdote, el auditorio parece estar muy atento, como siguiendo en detalles cada palabra del orador, todo da la idea de que están escuchando, de que se hallan en estado de alerta, más en el fondo psicológico de cada individuo hay algo que  traduce cada palabra del orador.

Ese algo que existe en nuestro interior, esa lengua secreta, se encarga de mal traducir, de mal interpretar todos los mensajes que llegan a nuestros oídos y que pasan a nuestra mente; este algo es una mala secretaria encargada de mal escuchar, de mal interpretar, de mal traducir, todos los mensajes que nos llegan del mundo exterior.

Esta mala secretaria es nuestra Personalidad, viva manifestación del Yo, del Mí Mismo, del Sí Mismo, que mora en cada uno de nosotros, ese Yo, ese Mí Mismo, ese Sí Mismo, solo sabe escucharse a sí, y no es capaz de abrirse a lo nuevo, es decir a comprender el real significado de la palabra.

El Yo traduce de acuerdo con sus prejuicios, preconceptos, temores, orgullo, ansiedades, ideas, recuerdos, etc.; el Yo se auto engaña tratando de confirmar al escuchar un mensaje sus propias sospechas, sus propias teorías, sus propios perjuicios y preconceptos, producto de sus experiencias y muchos ayeres.

Los alumnos en la escuela, las alumnas, los individuos que sumados constituyen el auditorio que escucha, realmente no están escuchando al orador, se están escuchando a sí mismos, están escuchando a su propio EGO, a su querido EGO MAQUIAVÉLICO, que no está dispuesto a aceptar lo REAL, lo VERDADERO, lo ESENCIAL del mensaje.

Solo con MENTE ESPONTÁNEA, libre del peso del pasado, en estado de plena RECEPTIVIDAD, podemos realmente escuchar sin la intervención de ese pésimo secretario de mal agüero llamado YO, MI MISMO, SÍ MISMO, EGO.

Cuando la mente está condicionada por la memoria, sólo repite lo que tiene acumulado, una mente así enfrascada confunde sus propios conceptos con la realidad.

Eso es similar como cuando un joven anda por las calles con un par de audífonos, escuchando su propia música, realmente a el poco le interesa lo que se sucede afuera, está aislado en su propio mundo, solo escucha sus propios ensajes.

Así es la Mente condicionada por las experiencias dolorosas de tantos y tantos ayeres, sólo puede oír el presente a través del sonido de los audífonos confusos del pasado.

Si queremos aprender a Escuchar, es urgente observar la charla interior y el lugar preciso de donde proviene. La charla interior equivocada es la "Causa" de muchos estados psíquicos inarmónicos y desagradables en el presente y también en el futuro.

Es necesario aprender a silenciar esa charla interior equivocada, que nos impide escuchar con sentido; antes debemos comprender que el silencio interior debe referirse específicamente a un mensaje preciso y definido, es decir que para esto nodebemos taponar nuestros opidos.

Cuando el proceso del pensar se agota intencionalmente durante la meditación interior profunda, se logra el Silencio Interior; más no es esto lo que queremos explicar en el presente programa.

"Vaciar la mente" o "ponerla en blanco" para lograr realmente el silencio interior, que nos permita escuchar, tampoco es lo que intentamos explicar ahora en estos momentos.

La práctica del silencio interior a que nos estamos refiriendo, tampoco significa impedir que el mensaje penetre en la mente. Estamos hablando de un tipo de Silencio Interior, específico y puntual respecto al mensaje que hemos recibido.

Necesitamos practicar el silencio interior, en relación al mensaje que nos llega a la Mente, sobre lo que nos cuentan en el día a día, eso que aun sin querer oímos de los demás, lo que hizo fulano de tal, etc., pero sin tocarlo con la lengua interior, sin ese discurso intimo..., si agegar, no quitar absolutamente nada.

Aprender a callar no solamente con la lengua exterior, sino también, además, con la lengua secreta, interna, resulta extraordinario, maravilloso, no hay dicha más grande que la paz de una mente quieta.

Muchos callan exteriormente, más al escuchar a alguien con su lengua interior desollan vivo al interlocutor.

La charla interior venenosa y malévola, produce confusión interior y si se la observa detenidamente veremos que está hecha de verdades a medias, o de verdades que se relacionan entre sí de un modo más o menos incorrecto, o algo que se agregó o se omitió.

SI QUEREMOS SABER ESCUCHAR, si queremos aprender a escuchar para descubrir lo nuevo del mensaje, debemos vivir de acuerdo a la filosofía de la MOMENTANEIDAD.

Es urgente vivir de momento en momento sin las preocupaciones del pasado, y sin los proyectos del futuro.

La VERDAD es lo desconocido de momento en momento, nuestras mentes deben estar siempre alertas, en plena atención, libres de prejuicios, preconceptos, a fin de que se vuelvan realmente receptivas.

Los Maestros y Maestras de escuela deben enseñarle a sus alumnos y alumnas la profunda significación que se encierra en eso de Saber Escuchar. Es necesario aprender a vivir sabiamente, reafirmar nuestros sentidos, refinar nuestra conducta, nuestros pensamientos, nuestros sentimientos.

De nada sirve tener una gran cultura académica, si no sabemos escuchar, si no somos capaces de descubrir lo nuevo de momento en momento. De qué sirve a un estudiante pasar 18 años en los establecimientos educativos, y lograr una carrera profesional, si ni siquiera ha aprendido a escuchar a los demás.

La Educación debe regresar a las cosas básicas y elementales de la vida; una Educación exageradamente teórica, no solo que aleja de la realidad a los estudiantes, sino que los vuelve fríos, sin interés por los demás.

El sujeto teórico seudo-sapiente se ríe de todos los que no coincidan con sus complicadas teorías y con los supuestos adquiridos en la Educación, que mantiene en su memoria.

 Los eruditos ya no son capaces de escuchar con mente espontánea, libre de supuestos mentales, teorías, preconceptos, etc. No son capaces de abrirse a lo nuevo y escuchar con sentido y verdadera atención cualquier planteamiento diferente a los suyos.

Los eruditos sólo escucharon para comparar lo que escuchaban con sus supuestos almacenados en la memoria. Los eruditos escucharon para traducir de acuerdo con su lenguaje de prejuicios y preconceptos y llegar a la conclusión de que lo que escuchaba era pura fantasía. Así son siempre los eruditos, sus mentes ya no son capaces de descubrir lo nuevo.

La Libre Iniciativa y la Convivencia Social, desarrollan la inteligencia humana, desgraciadamente nuestra Educación Moderna no cultiva, no fomenta la Libertad y la Creatividad en el individuo; si a esto le sumamos que la Convivencia Social es un diálogo de sordos, ya que no sabemos escuchar, vemos como la Sociedad se acerca a un nuevo periodo de Barbarie.

El sentido de la Transformación Social es que el ser humano se vuelva cooperativo, pero como podemos cooperar sino no comprendemos el punto de vista ajeno, y cómo podríamos comprender el punto de vista ajeno, sino sabemos escuchar a los otros.

Donde hay cooperación hay progreso y civilización, donde se excluye la cooperación el fracaso es inevitable. Las organizaciones que explotan al prójimo, son sordas y no comprenden el punto de vista de sus trabajadores, esas sociedades en la Nueva Latinoamérica están condenadas a desaparecer.

Los trabajadores que no comprenden el punto de vista de los empresarios, terminan destruyendo su fuente de trabajo, por lo tanto están condenados al fracaso.

Todo diálogo social, debe empezar por el desarrollo del Saber Escuchar en el individuo, la suma de individuos sordos, que no saben escuchar a los demás, provoca frías relaciones sociales.

El enfriamiento de las relaciones sociales, nos conduce inevitablemente a la violencia y al asesinato como fórmula para resolver conflictos. Nosotros somos una familia y no debemos atormentarnos la vida miserablemente porque eso es absurdo.

Que los padres aprendan a escuchar a sus hijos, que los hijos aprendan a escuchar a sus padres; que los políticos aprendan a escuchar al pueblo, que sepan rectificar errores, eso es urgente y necesario.

Es urgente que los obreros aprendan a respetarse mutuamente; es urgente que los obreros acaben con todo tipo de violencia, es urgente que los obreros aprendan a escucharse mutuamente, sólo así es posible la unión total.

Mucha gente quiere una fórmula mágica especial, que les permita aprender a escuchar a los demás; pero es que caso ¿existe una mejor escuela que la de la misma vida?

En la convivencia con el prójimo podemos auto descubrir, esos factores psicológicos, esos defectos escondidos que nos impiden escuchar y entonces podemos verlos si queremos.

Lo importante es analizar nuestros defectos cuando los descubrimos, y luego por medio de la auto-reflexión y de la meditación de fondo, podemos investigar el origen de tales defectos, y descubrir sus resortes secretos en los distintos repliegues inconscientes de la mente.

Puede estar seguro querido radio escucha que todo defecto descubierto en forma íntegra deja de existir inevitablemente, así es como podemos cambiar de instante en instante, así vamos aprendiendo a escuchar de instante en instante.

Necesitamos refinar la atención, refinar nuestros modales, refinar nuestras personas, las cosas, etc. Es imposible ser verdaderamente refinado cuando no sabemos escuchar.

Las Mentes toscas, rudas, deterioradas, degeneradas, jamás saben escuchar, jamás saben descubrir lo nuevo, esas Mentes sólo comprenden, sólo entienden en forma equivocada las traducciones absurdas de ese secretario llamado YO, MI MISMO, EGO.

Ser refinado es algo muy difícil y requiere plena atención. Alguien puede ser persona muy refinada en las modas, trajes, vestidos, jardines, vinos, joyas, automóviles, amistades, y, sin embargo, continuar en lo intimo siendo rudo, tosco, pesado.

Quien sabe vivir de momento en momento, marcha realmente por el camino del verdadero refinamiento. Quien tenga Mente receptiva, espontánea, íntegra, alerta, camina por la senda del auténtico refinamiento.

Quien se abre a todo lo nuevo abandonando el peso del pasado, los preconceptos, los prejuicios, recelos, fanatismos, etc., marcha triunfalmente por el camino del legítimo refinamiento.

La mente degenerada vive embotellada en el pasado, en los preconceptos, orgullo, amor propio, prejuicios, etc. La mente degenerada no sabe ver lo nuevo, no sabe escuchar, está condicionada por el AMOR PROPIO.

Los fanáticos del MARXISMO-LENINISMO no aceptan lo nuevo; no admiten las dimensiones superiores del espacio, por amor propio, se quieren demasiado a sí mismos, se apegan a sus propias teorías materialistas absurdas.

Esas son mentes degeneradas, mentes decrépitas que no saben escuchar, que no saben descubrir lo nuevo, que no aceptan la realidad porque están embotelladas en el AMOR PROPIO, aman demasiado sus teorías. Mentes que se quieren demasiado a sí mismas, mentes que no saben de REFINAMIENTOS CULTURALES, mentes toscas, mentes rudas, que sólo se escuchan a sí mismos.

En la medida que trabajamos sobre sí mismos para desarrollar el Saber Escuchar, es decir cuando nos vamos conociendo, entonces conocemos por experiencia mística directa nuestros propios Mundos Internos, es evidente que  así se conoce también los mundos internos de todas las personas que pueblan la faz de la tierra.

Nuestros Mundos Internos están conformados por nuestras ideas, deseos, voliciones, sensaciones, emociones, estados de conciencia, etc.

La Educación debe enseñar a escuchar y a vivir sabiamente. Los maestros y maestras de escuelas, colegios, universidades deben enseñarles a sus alumnos y alumnas el camino auténtico del Saber Escuchar. Realmente sólo así es posible alterar este orden de cosas y crear la verdadera y legítima Democracia.

Sólo eliminando el error adviene a nosotros la verdad. Sólo desintegrando el "Yo mismo", mis prejuicios y temores, mis pasiones y deseos, creencias y encastillamientos intelectuales y auto-suficiencias de toda especie, estamos preparados para Saber Escuchar.

La Gnosis está destinada a aquellos aspirantes sinceros que verdaderamente quieran trabajar sobre sí mismos y cambiar.

Quienes se encuentran embotellados dentro de sus procedimientos intelectuales y normas fijas, no solo no saben escuchar, sino que presentan siempre resistencia a estas ideas revolucionarias.

El trabajo relacionado con la disolución de los diversos elementos que nos impiden escuchar resulta espantosamente difícil. La comprensión resulta muy elástica, por ello necesitamos ahondar cada vez más profundamente; lo que hoy comprendimos de un modo, mañana lo comprenderemos mejor.

Si observamos a la gente podemos evidenciar en forma directa, que cada persona tiene su propia canción, su propia charla equivocada que le impide escuchar a los demás.

Muchas veces es posible ver a una persona que nos escucha atentamente y con aparente sinceridad, pero lo que espera es que nos callemos, para empezarnos a contar su propia historia, y nos damos cuenta que no nos ha escuchado, cuando su canción es tan diferente de la nuestra. 

El problema es que casi siempre pensamos y sentimos que somos víctimas, que somos unas mansas ovejas y queremos hacérselo saber a los demás; otras veces nuestro centro emocional está lleno de emociones de culpabilidad, entonces todo lo que oímos, es traducido como una acusación hacia nosotros.

Cada cual canta su propia canción; que son esas cuentas psicológicas; sentir que a uno le deben, quejarse, auto considerarse, sentirse víctima, o sentarnos en el banquillo de los acusados, cuando aparecen esos sentimientos de culpabilidad, etc.

A veces la gente "canta su canción, así porque si", sin que se le dé cuerda, sin que se le aliente y en otras ocasiones después de unas cuantas copas de vino...

Nosotros decimos que nuestra aburridora canción debe ser eliminada; ésta nos incapacita interiormente, nos roba mucha energía y nos impide escuchar con sentido todo mensaje que llega a nosotros.

En cuestiones de Psicología Revolucionaria, alguien que canta demasiado bien, —no nos estamos refiriendo a la hermosea voz, ni al canto físico—, ciertamente no puede ir más allá de sí mismo; se queda en el pasado...

Una persona impedida por tristes canciones psicológicas no puede despertar su Conciencia; no puede ir más allá de lo que es. Para pasar a un Nivel Superior de Conciencia, es preciso dejar de ser lo que se es; necesitamos no ser lo que somos. Si continuamos siendo lo que somos, nunca podremos elevar nuestro Nivel de Conciencia.

En el terreno de la vida práctica suceden cosas insólitas. Muy a menudo una persona cualquiera traba amistad con otra, solo porque le es fácil cantarle su canción, es decir porque el otro lo oye con suma atención. Desafortunadamente tal clase de relaciones termina cuando al cantante se le pide que se calle, que cambie el disco, que hable de otra cosa, que cambie su canción, etc.

Entonces el cantante resentido, se va en busca de un nuevo amigo, de alguien que esté dispuesto a escucharle por tiempo indefinido, así es como todos buscamos ser escuchados y comprendidos.

Comprensión exige el cantante, alguien que le comprenda, como si fuera tan fácil escuchar a otra persona y menos aún comprender su punto de vista. Para comprender a otra persona es preciso comprenderse a sí mismo. Desafortunadamente el buen cantante cree que se comprende a sí mismo.

Son muchos los cantantes decepcionados que cantan la canción de no ser comprendidos y sueñan con un mundo maravilloso donde ellos son las figuras centrales.

Sin embargo no todos los cantantes son públicos, también los hay reservados; no cantan su canción directamente, más secretamente la cantan. Son gente que ha trabajado mucho, que han sufrido demasiado, se siente defraudada, piensa que la vida les debe todo aquello que nunca fueron capaces de lograr.

Sienten por lo común una tristeza interior, una sensación de monotonía y espantoso aburrimiento, cansancio íntimo o frustración a cuyo alrededor se amontonan los pensamientos.

Incuestionablemente las canciones secretas nos cierran el paso en el camino del Saber Escuchar. Desgraciadamente tales canciones interiores secretas, pasan desapercibidas para nosotros mismos, las percibimos como algo de lo más natural, a menos que intencionalmente las observemos.

De nada sirve permanecer diez y quince años metidos en escuelas, colegios y universidades, si al salir somos inhumanos en nuestros pensamientos, ideas, sentimientos y costumbres.

Se necesita una verdadera revolución educativa, en forma urgente porque las nuevas generaciones significan el comienzo de la nueva era.

Ha llegado la hora de la REVOLUCIÓN VERDADERA, ha llegado el instante de la REVOLUCIÓN FUNDAMENTAL.

El pasado es el pasado y ya dio sus frutos. Necesitamos comprender la honda significación del momento en que vivimos.

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