LA DEMOCRACIA

Necesitamos tener Fe en la Democracia Latino Americana y en especial en la de nuestro país, pero Fe consciente, y no únicamente la Fe pasiva. La Fe pasiva se basa en creencias, suposiciones y proyecciones mentales, es estática y estanca la mente, necesitamos tener fe solar. Distíngase entre creer y saber, el que cree y el que no cree en el fondo dudan. Creer y no creer son dos extremos de lo mismo. Nosotros queremos saber, amamos el saber, esa es la Fe Solar, la Fe Luminosa como un bello amanecer.

Desgraciadamente en estos instantes de Crisis Mundial, existe en nuestro continente duda sobre la efectividad positiva de esta forma de convivencia social llamada Democracia.

Huracanados vientos revolucionarios vienen azotando nuestra querida tierra Latino-Americana. La gente está inconforme y angustiada, hay hambre y la gente con hambre no cree en la Democracia. El estado social y económico de América es desastroso y el estado político es cruel y despiadado. Necesitamos con urgencia construir la Democracia, esta se desarrolla en forma lógica y escalonada y si queremos comprender en forma íntegra su esencia y su Filosofía debemos estudiarla profundamente.

La vida en las grandes ciudades es angustiosa, ya solo se habla de matar o de que lo maten, diariamente la prensa nos hace compartir escenas que desgarran el alma, todo esto producto de un sistema económico acaparador, concentrador y egoísta; o de modelos políticos elitistas, direccionados como se dice para la gente del partido,  sumado a estructuras sociales que no se han renovado desde la época de la colonia.

En tales circunstancias es absurdo decir que la Democracia Latinoamericana se ha desarrollado correctamente, la realidad es que hoy por hoy la Democracia sigue siendo un ideal, un anhelo, una meta a donde queremos llegar. Actualmente la Democracia es una creencia.

Si realmente amamos la Democracia no debemos tener fe pasiva, la fe lunar, la fe de las creencias; si realmente amamos la Democracia y por ende la Justicia; necesitamos de Fe Solar, de Fe consciente, necesitamos la Fe solar, la Fe Sabiduría.

Eso significa que tener Fe en la Democracia es empezar a construirla, y en esta obra todos debemos colaborar. Democracia no es el gobierno de la minoría, Democracia no es el gobierno de la mayoría. Democracia es el gobierno de todos, en el cual se reflejen sabiamente mayorías y minorías.

La sociedad es la extensión del individuo, y lo que es el individuo es la sociedad y de esta sociedad depende el gobierno. Si queremos verdaderamente una sociedad libre, necesitamos que el individuo se haga libre. No podemos concebir inteligentemente una sociedad perfecta, dueña de sus propios destinos, si el individuo no es perfecto y dueño de sus destinos, el individuo necesita aprender a gobernarse a sí mismo. El individuo actualmente no sabe gobernarse a si mismo y por ello necesita que otros lo gobiernen.

Si el individuo supiera gobernarse así mismo, comprendiera que no existen problemas aislados, que todos los problemas son parte de todos, que los problemas sociales son la suma de los problemas individuales, que todos dependemos de todos, el individuo que sabe gobernarse jamás es individualista, al contrario ha desarrollado profundamente el sentimiento social.

Se ha dicho que para los países tropicales, es necesario un gobierno duro, es decir una semidictadura, debemos recalcar que el dueño verdadero del poder público es el pueblo en su totalidad y no uno o varios predestinados.

Pero la Democracia es algo más que una forma de gobierno, Democracia es el orden social sabiamente establecido por hombres y mujeres libres; que deciden su forma de gobierno. Para que el gobierno sea el fiel reflejo del sentir popular, el pueblo debe organizarse. Nunca será una dictadura ni de las mayorías ni la dictadura de las minorías.

No negamos que el poder pueda delegarse, pero sí afirmamos que el poder es una concesión de pueblo. Jamás sería Democracia el apoyo equivocado que el pueblo engañado da a un dictador vitalicio.

Democracia es el estado de consciencia alcanzado por todo hombre verdaderamente libre. No debemos concebir la Democracia sin anhelos humanistas, sin caridad universal, solo así la sociedad trabajará para el individuo, obviamente la sociedad ha sido creada para servir a todos los individuo que la conforman y no a unos pocos zánganos del poder público.

Pero el individuo debe colaborar con la sociedad, y la sociedad debe colaborar con el individuo. No podemos concebir la Democracia en una sociedad sin garantías sociales para sus miembros. Un estado Democrático es el garante de todas las actividades del pueblo.

Las dictaduras de extrema derecha o extrema izquierda ahogan en sangre la opinión pública, y una de las primeras condiciones de un estado Democrático es la libertad de expresión, que cada cual diga lo que quiera, pero lógicamente ceñido a la verdad y al respeto al derecho ajeno.

La Democracia debe fluir libremente como el dulce fluir del pensamiento. Que los que tienen algo que decir en favor del sistema social lo digan, la suprema autoridad en una sociedad es el bien común.

Debemos aclarar que hasta ahora en la América latina, la Democracia es tan solo un anhelo, una esperanza, un creencia, un ideal que queremos alcanzar. El ideal de la Patria grande que todos soñamos, el ideal de la sociedad justa es posible si todos colaboramos con la Educación.

El enemigo número uno de la Democracia es la injusticia, la educación debe formar al hombre democrático, al ciudadano democrático en el cual la justicia sea su motivo y causa de vida. La América Latina es una bella niña que marcha por el camino de la vida, pero dos horribles monstruos la asechan en la profundidad,  los  nombres de esos monstruos son Capitalismo y Comunismo.

El terrible materialismo de derecha y el horrible materialismo de izquierda pretenden corromper a nuestra hermosa niña. Obviamente el capital individual es la base del un sistema y el capital del estado es la base del otro, es decir ambos son capitalismos y ambos son materialistas.

Un gran estadista dijo: "En un gran sistema político las partes viven del todo, y el todo vive de las partes". "Por consiguiente los intereses sociales deben estar regulados por el estado dentro de una simetría de intereses, de modo que no resulten hijos y entenados; esto pasa con las garantías sociales, para algunos ciudadanos de la nación hay leyes y para otros no existen. Y esto precisamente se da en los dos sistemas antes mencionados.

La Democracia Latino-Americana tiene sus peligros y también sus antídotos, señalarlos es realmente nuestro deber. Es urgente estudiar los varios ingredientes, contenidos entre esa copa de oro que se llama Democracia. La sociedad es la extensión del individuo, y lo que es el individuo es la Sociedad. La Democracia es el resultado del nivel conscientivo de un pueblo.

La idea democrática no es compatible con las formas de Gobiernos Totalitarios, ya sean estos de extrema derecha o de extrema izquierda, la Democracia nunca será extremista ni el resultado de una reacción. Cuando la Democracia llegue a la Perfección los gobiernos desaparecerán por inútiles e innecesarios.

El comunismo no existió ni siquiera en la Ex-Unión Soviética, solo existió el Socialismo de tipo Marxista-Leninista, llamado convencionalmente comunismo. La suprema aspiración del Marxismo-Leninismo fue llegar al comunismo. Al ex-socialismo de la Unión Soviética se le puede llamar tan solo capitalismo de Estado. Si el capitalista particular tiene el capital es el amo y el trabajador el esclavo, si el Estado tiene el capital el estado será el amo por lo que tendrá el sartén por el mango, y el pueblo inevitablemente será el esclavo.

Es absurdo citar cono lo hacen los escritores Marxistas como antecesores del Comunismo a Licurgo, Agis IV, Platón, y a los grandes sacerdotes del cristianismo antiguo como Justiniano, Tertuliano, Juan Crisóstomo, etc. Es claro que nosotros debemos ir más allá del capital privado y del capital del estado, pero esto no significa comunismo.

Necesitamos retomar los antiguos sistemas políticos de los patriarcas del cristianismo antiguo, pero eso no significa ser comunistas, de tipo Marxista-Leninista ateo. El Socialismo Cristiano primitivo no acepta el capital del estado ni el capital individual.

El Socialismo Cristiano Primitivo es capital colectivo y en él no se aceptan las clases desposeídas ni las clases poseedoras. Los historiadores del comunismo se equivocan lamentablemente confundiendo miserablemente la doctrina socialista cristiana de los padres de la iglesia, con el abominable comunista ateísta.

La filosofía del comunismo ateísta es la filosofía de Carlos Marx, que no resiste un análisis de fondo.

La igualdad social, la sociedad sin clases a la que aspiraban los fanáticos de la Rusia Soviética, es imposible mientras exista el egoísmo. El mí mismo, el ego, quiere siempre subir, trepar al tope de la escalera, hacerse sentir, descollar, formar clases privilegiadas, castas, grupos, élites, siempre a su favor.

El Ego Humano, el yo es energía mental estancada, el Ego no es el cuerpo físico pero se expresa a través del cuerpo físico. El Ego es energía psíquica que se perpetúa en nuestros descendientes mediante las leyes de la Genética. El Ego, el yo, ese mi mismo solo puede disolverse mediante una rigurosa comprensión, porque en el fondo es producto de la ignorancia, la reflexión, la analítica de fondo, la meditación pueden lograr la gran transformación individual.

Disuelto el Egoísmo, dentro de nosotros solo queda la Consciencia, el Ser, es energía libre en su movimiento. La sociedad sin clases es imposible mientras exista el egoísmo, los socialistas ateos de la antigua Rusia que tanto aspiraban a una sociedad sin clases, establecieron una dictadura del proletariado y una aristocracia de grandes intelectuales.

Nosotros no debemos cree en élites intelectuales mientras estas sean egoístas y solo sirvan para cultivar el personalismo. La autentica sociedad sin clases fue enseñada, fue predicada por los primeros padres de la Iglesia Cristiana Primitiva.

La sociedad sin clases fue predicada por los santos y solo los santos pueden tener realmente una Sociedad sin clases. Consideramos santos a todos aquellos que ya pasaron a la otra orilla, a aquellos que se liberaron de las influencias sociales.

Pasaron a la otra orilla todos aquellos en que sus preocupaciones personales, no solo se inspiran en sí mismos, sino también por los demás, para ellos la existencia del tu es tan importante que la del yo; es cuando aprendemos a vivir de instante en instante, como el viento que no sabe de dónde viene ni a donde va, explicaba hermosamente por el Cristo en su parábola, demostrando el absoluto estado de desprendimiento y liberación.

Ningún ser humano puede ser un santo mientras no haya disuelto sus deseos egoístas, sus afanes de acumulación, los exquisitos egoísmos de familia, mi apellido, mi nobleza, mi realeza, mi raza, mi nación, mi dinero, etc. todo eso es precisamente el Ego, que quiere subir al tope de la escalera, descollar, ser grande, etc.

La concentración de las riquezas en unas cuantas manos es Capitalista y es Marxista-Leninista también. El Capital de estado y el capital privado son dos formas de lo mismo y en el fondo son dos sistemas que roban al pueblo. El capital es del pueblo y sólo el pueblo tiene derecho a tenerlo, el pueblo trabaja el capital, es lógico que el capital sea del pueblo.

Ya se dijo que la tierra es de quien la trabaja, ahora debemos decir que el capital es quien lo trabaja. Y en la medida que la nueva era Latinoamericana se adentre, el capital como un instrumento social deberá ser bien distribuido en forma social, dentro de la denominada justicia distributiva.

El Marxismo leninismo establece un nuevo tipo de esclavitud basado en el capital del estado. El Marxismo Leninismo no reconoce que el capital es del pueblo. La dictadura del Proletariado como sistema para realizar la transición del sistema capitalista a la Sociedad sin clases del futuro, es una quimera absurda, porque dentro de la misma dictadura del proletariado de la anterior Rusia Soviética se formó un nuevo tipo de burguesía.

El sistema comunista o socialista marxista hace del Estado un Dios, y del pueblo un esclavo incondicional. Los principios extremos del Marxismo son los siguientes: 1.-Acabar con la propiedad de la tierra. 2.- Acabar con todo género de capital privado. 3.- Acabar con el derecho de herencia. 4.- Confiscar los bienes de las personas. 5.- Apropiarse de todos los medios de transporte en forma tal que solo los controle el estado. 6.- Multiplicar las fábricas del estado. 7.- Establecer granjas colectivas. 8.- Establecer el trabajo obligatorio, y crear ejércitos industriales. 9.- Establecer la educación pública obligatoria antirreligiosa y basada en la dialéctica  materialista.

El comunismo marxista es una reacción contra el capitalismo. El sistema Marxista Leninista es una continuación modificada del error, es el resultado del error. Este sistema es conservador, como resultado del error sigue erróneo por lo extremista y ningún sistema extremista jamás puede ser inteligente. Un sistema inteligente es ante todo sintético y conciliador.

El extremismo marxista creó ejércitos bárbaros que saquearon el Tíbet, y asesinaron Monjes, y violaron Monjas, y esclavizaron a millones de personas. No nos olvidemos que hasta ahora la China Comunista sigue ocupando al Tíbet.

El extremismo marxista asesinó a millones de personas en Hungría y esclavizó a muchos pueblos. El extremismo marxista convirtió a muchos países en mares de sangre. El capitalismo estatal del marxismo leninismo siendo una reacción contra el capitalismo egoísta es de hecho reaccionario.

Distíngase del Socialismo Cristiano de tipo Latinoamericano, que es algo completamente nuevo, que no acepta la violencia, que está contra la guerra, y rechaza las revoluciones de sangre. La posición latinoamericana debe ser absolutamente independiente, sin más armas que la inteligencia.

Debemos formar una corriente esencialmente cristiana antes que nada y compuesta de hombres de buena voluntad para iniciar un nuevo orden de los siglos, que debe iniciar América Latina.

La Nueva cultura será la síntesis de estos dos mil años de historia. Si Carlos Marx logró infectar a Europa y Asia con su sofisteria barata, en Latinoamérica fracasó, por que América Latina es profundamente cristiana y no se ha dejado deslumbrar por dichas teorías; porque Latinoamérica está madura para dar un salto hacia sistemas de convivencia social, que un mayor equilibrio. Somos libres y queremos seguir siendo libres, sin dictaduras de extrema derecha o de extrema izquierda, sin espías, sin campos de concentración, sin Siberias.

Necesitamos una autentica y verdadera Democracia y esto solo es posible a base de Cristianismo puro y dinámico, en base a un Cristianismo dialectico y revolucionario.

Marx contra el Cristo, pero Marx no le sirve ni para limpiarle el polvo de las sandalias al maestro. La dialéctica marxista convenció a los resentidos, a los tiranos de la extrema izquierda. Nunca pudo convencer a Latinoamerica la doctrina marxista, porque la región ya ha madurado.

Nosotros debemos ir al grano, a Latinoamerica no le gusta vivir soñando con paraísos al estilo soviético; pero la Democracia Latinoamericana sigue siendo una creencia.

Si queremos cooperar con el Gran Cambio, con la Gran Transformación Social, es necesario que cada uno de nosotros cambie; es urgente acabar con el egoísmo y cultivar la Democracia, cuyo principal principio es el respeto del derecho ajeno.

Sólo así podemos hacer un mundo mejor, es indispensable eliminar la codicia y la crueldad que cada uno llevamos dentro, porque solo cambiando, cambiará la Sociedad y la Democracia habrá nacido como sistema social.

La Transformación Social latinoamericana hay que realizarla dentro de cada ciudadano Latinoamericano.

Pero actualmente hay hambre, hay dolor, hay confusión, pero nada de esto se puede eliminar mediante violentos y absurdos procedimientos, la transformación social, el mejoramiento social, jamás es producto de los gobiernos, es un proceso que va de abajo hacia arriba,

Las revoluciones sangrientas, los golpes de estado y los fusilamientos, son  procedimientos equivocados, que jamás han cambiado nada; es absurda la imposición violenta, porque la violencia sólo engendra más violencia, y el odio más odio. Solo con la paz podemos realmente resolver problemas, necesitamos paz si es que realmente queremos hacer una nueva Sociedad.

No se deshacen las tinieblas a manotazos, sino trayendo luz, tampoco se deshace el error combatiendo cuerpo a cuerpo con el, sino difundiendo la verdad. Toda violencia política por justificada que sea es equivocada.

Solo avanzando la verdad, el error habrá retrocedido, y es imposible que la verdad avance sobre nuestros pueblos, si mantenemos sistemas educativos dictatoriales, que no nos permiten pensar; que castran la capacidad de análisis, de confrontación lógica.

Al atacar el error provocamos el odio de los que yerran y así de equivocados llegaran a una peor condición.

Atacando el mal se provoca el rencor de los que mal actúan, y así motivaremos su venganza y serán peores, esto es un círculo vicioso.

Lo que necesitamos es difundir la luz para disipar las tinieblas del error. Hagamos luz desde los mismos bancos de las escuelas, enseñemos a pensar a los niños, enseñémosles los valores de la Paz, la Libertad, la Justicia y el Amor.

Se hace necesario estudiarnos a sí mismos, si es que realmente queremos amar a nuestros semejantes; se hace necesario descubrir en nuestras mentes los factores de la guerra; para amar la Paz; es necesario sacrificar muchos hábitos que nos esclavizan para alcanzar la verdadera libertad, es necesario aprender a ser justos, para luchar por la justicia social; debemos dejar de ser dictadores para valorar la Democracia.

Es necesario comprender que solo acabando con los factores del egoísmo y la crueldad que cada individuo lleva adentro, es posible hacer un mundo mejor, un mundo sin hambre y sin temores.

Es lamentable que América Latina aun duerma, es terrible que aun no despierte y que no comprenda la  misión encomendada por la historia, es inaceptable sostener modelos educativos extemporáneos, es necesario comenzar la gran revolución social, para ello cada uno de nosotros debe encender su propia llamarada revolucionaria dentro de sí mismo.

Para re direccionar la Historia, es necesaria una Gran Rebelión, han pasado muchas décadas desde que Latinoamérica se hizo libre de España y Portugal; mas seguimos siendo esclavos.

El modelo social colonialista y esclavista, no ha pasado aun; el viejo modelo colonialista simplemente pasó de internacional, a las estructuras nacionales, el poder explotador europeo, fue heredado por determinadas familias y para desmontar esa estructura oligárquica no debemos montar una nueva oligarquía que nazca de ciertas estructuras políticas, por eso mismo los grandes cambios sociales no son productos de los gobiernos, sino de los individuos, desde la base de la sociedad.

Todo cambio impuesto desde arriba, desde las alturas del poder, es imposible. Los Gobiernos no deben organizar a la sociedad civil, dizque para que participen en la toma de decisiones y fiscalicen sus acciones; simplemente los gobiernos deben dejar que la sociedad civil se organice, deben permitir un marco de libertad adecuado, lo contrario tan solo es otra impostura.

Debemos venerar y respetar a la Madre Patria España, pero todo aquello que transforma nunca es lo viejo sino lo nuevo. América Latina es un nuevo fenómeno racial, de hecho representa un nuevo sistema social, con nuevos propósitos y nuevas ideas, no olvidemos que de España heredamos los sistemas Oligárquicos Militares.

Los libertadores militares Latinoamericanos, fueron venerados por sus pueblos como los verdaderos padres de las naciones nacientes, y sus sucesores se consideraron como los herederos naturales y legítimos de los libertadores. Así se fue formando una casta militar. Especie de nueva nobleza, republicana de nombre, monárquico militarista de hecho; clase social que originó la actual oligarquía criolla.

Latinoamerica debe ser cultivada desde los mismos bancos de las escuelas, el sentido de sociedad debe ser sembrado en cada actividad educativa; porque está América Latina llamada a transformar la política mundial, está llamada la América Latina a formar la gran nación Latinoamericana.